Hoy veremos, “actúa de forma sabia y prudente”
Ante la adversidad existen mil formas de actuar, nuestra reacción es diferente ante cada caso dependiendo de su gravedad o condición.
Tanto los impulsos, como las respuestas rápidas de nuestro cerebro, sumándole nuestras desequilibradas emociones, nos llevan a tomar decisiones a la ligera, esto hace que las cosas empeoren y terminamos arrepintiéndonos de nuestro comportamiento.
¿Sueles tu querida amiga actuar con cautela, cuando la tempestad llega? O ¿eres de las que con calma apaciguan la tormenta?
Hay ocho actitudes con las que Daniel actuó sabia y prudentemente que nos ayudaran a tener un panorama espiritual, frente a lo que Dios anhela, sea nuestro comportamiento ante la adversidad.
1. Busca primero a Dios: busca a tu Señor en oración. Salmo 25
2. Agradece a Dios. 1 Tesalonicenses 5:18
3. Reconoce la Soberanía de Dios en el asunto. Salmos 95:3
4. Habla sabia y prudentemente. Daniel 2:14
5. No temas a nada, ni a nadie. Deuteronomio 3:22
6. Recurrir a los hermanos en Cristo. Hechos 1:4
7. Pedir oración a los hermanos en Cristo. Hechos 1:4
8. Actúa con humildad ante la situación. Daniel 2:30
Si actúas de esta manera ante los problemas, como consecuencia alabarás y glorificarás El nombre de Dios, que debe ser tu principal propósito.
Seguramente estarás rodeada de personas incrédulas que te observan; y tal vez seas tú el único reflejo del carácter de Cristo para ellos, que por su ceguera espiritual no le pueden ver. Puedes ser tú la Biblia más cercana que ellos no quieren leer.
Además, tu proceder puede ser utilizado por el Señor para humillar a aquel que, con dureza de corazón y falta de entendimiento, rehúsa acercarse a Él.
Con amor, Tania M Olsson. Nos veremos en una próxima oportunidad con una reflexión más, aquí en Diario de una mujer cristiana. Bendiciones mil.
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