Haz lo que le agrada al Señor

Amada amiga, hoy quiero compartir contigo un precioso versículo que me hizo reflexionar profundamente, sobre lo que de verdad le agrada a Dios.

A veces cuando leemos la biblia y encontramos muy fácil entender ciertos versículos, los pasamos por alto, mas no nos detenemos a meditar en ellos, para dejar que el Espíritu Santo nos hable a profundidad el mensaje que allí se encuentra.

Miqueas 6:8 es un precioso versículo que me exhorta y te exhorta a entender cual es la buena voluntad de Dios, el dice lo siguiente: “Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios.

Desglosando el versículo podemos resumir lo siguiente:

Dios habla claro al hombre a través de Sus Santas Escrituras: y siempre enfatiza lo que espera de nosotras como sus hijas amadas.

1. Hacer justicia: Dios es justo, por lo tanto, debemos practicar la justicia y estar de acuerdo con Su pensamiento, palabra y verdad.

2. Amar misericordia: deleitarnos incondicionalmente en Su amor inquebrantable, y así mismo practicarla con nuestro prójimo. Las dos palabras, incondicional e inquebrantable, se refieren a no condicionar nuestras acciones para obtener algo, y practicar la misericordia permanentemente.

3. Humillarte ante Dios: Reconocer nuestra posición de humildad ante el poder de Dios y someternos a Su voluntad.

Estas actitudes son las que recompensa nuestro Padre que está en los cielos, las que Él observa directo a lo más profundo de nuestro corazón, y las que pesa según su balanza de justicia y verdad.

A menudo nuestra ceguera espiritual no nos deja ver el conocimiento del Señor, bloquea nuestro corazón al compromiso genuino y sincero que Él demanda de nosotras.

Deja que el Espíritu Santo tome el control de tu corazón y podrás reproducir en tu vida la conducta correcta, que corresponde al mensaje que el Señor nos habla hoy

Con amor, Tania M Olsson. Nos veremos en una próxima oportunidad con una reflexión más, aquí en Diario de una mujer cristiana. Bendiciones mil.