La Biblia te guía en la verdad y la dirección correcta

Consideración #2

Hoy vamos a 2 Timoteo 3:16 donde Pablo recalca que las Escrituras son total inspiración de Dios y no son simplemente pensamientos de escritores individuales a quienes el Señor dejo expresar estos pensamientos en sus propias palabras.

La verdad en la que insiste las Escrituras es que las mismas palabras originalmente dadas por Dios a los hombres fueron inspiradas por Él.

Debido a que la Biblia es la palabra de Dios, es útil para guiarnos a la verdad y a la dirección correcta, aquella que nos apunta a Dios.

Aunque hallan pasajes oscuros que no podamos entender en el momento, el Espíritu Santo se encargará de mostrar que hay alimento espiritual en cada uno de esos pasajes. Por lo tanto, la Palabra del Señor es:

1. Útil para enseñar: aquí se refiere a doctrina. Expone la mente de Dios tocante a temas como la trinidad, los ángeles, el hombre, el pecado, la salvación, la santificación, la iglesia y los acontecimientos futuros.

2. Útil para reprensión: al leer la Biblia, esta nos habla de manera directa sobre aquellas cosas que desagradan a Dios. También es provechosa para refutar los errores y para responder al tentador.

3. Útil para corrección: No solo señala lo que es erróneo, sino que expone la forma en que se puede enderezar. Por ejemplo, en las escrituras dice: “El que hurtaba ya no hurte más”, y añade “sino que trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga con que compartir con el que padece necesidad” (Ef 4:28). La primera parte del versículo se podría considerar como reprensión, mientras que la segunda parte es corrección.

4. Útil para instrucción en justicia: Finalmente la gracia de Dios nos enseña a vivir vidas piadosas, pero la palabra de Dios da de manera detallada las cosas que constituyen una vida piadosa.

Querida amiga, para completar el tema, Salmos 119:105 dice: “Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino” Por lo que “La Palabra nos guía prohibiendo ciertas formas de comportamiento y enseñándonos el camino correcto.

¡Cuánto debemos a los amistosos rayos de la luz de esta lámpara!

Con amor, Tania M Olsson. Nos veremos en una próxima oportunidad con una reflexión más, aquí en Diario de una mujer cristiana. Bendiciones mil.