¡Recuerda lo que el Señor ha hecho por ti!

Dicho de otra manera “no olvides lo que el Señor ha hecho por ti”

Dios actúa en maneras que a veces no podemos entender, más nuestro trabajo, no es entenderlas; sino dejarlas en Su control ya que Él tiene un propósito específico.

El Señor permite en la vida del cristiano tiempos de prueba y aflicción, que buscan mostrar lo que verdaderamente habita en nuestro corazón; al igual que reflejar nuestra actitud hacia Él y su voluntad. El Señor quiere probar nuestra fidelidad de una manera muy singular, Él nos prueba a fuego.

Esos tiempos de prueba son singulares, milagrosos y muchas veces desconocidos para nosotras. Su objetivo principal es humillar nuestro ser para que reconozcamos Su poder y la debilidad en nosotras. Él quiere doblegar nuestro corazón, e inclinar nuestra cerviz, para que con el alma entendamos sabiamente lo que es la obediencia a Su Palabra y Su voluntad.

Rememorar la naturaleza de Dios es parte esencial de nosotras como hijas de Dios, ya que él nos ha escogido.

El nos ha rescatado de las garras del enemigo y nos ha guiado desde ese entonces. Por lo que recordar, y tener memoria de donde venimos y hacia dónde vamos, es tan importante al momento de querer ser bendecidas por el Señor.

Recordar todo lo que el Señor ha hecho por nosotras, Su amor, Su muerte en una cruz y Su resurrección, no solo debe conmocionar nuestro corazón, sino también nos debe llenar de alegría.

La remembranza del Todopoderoso nos llena de una capacidad milagrosa que proviene de Dios para luchar diariamente contra el pecado y las diferentes tentaciones, la cual nos lleva a obtener la victoria.

Con amor, Tania M Olsson. Nos veremos en una próxima oportunidad con una reflexión más, aquí en Diario de una mujer cristiana. Bendiciones mil.