"Seis cosas...y aún siete"

Introducción

Querida amiga, damos comienzo a esta bendecida semana con una serie que te va a encantar. Una serie con una temática práctica y clara que enriquecerá tu vida con su aplicación bíblica, dirigida por Dios.

Diariamente estaré publicando una reflexión del tema que estará cifrada de acuerdo con el orden del mismo.

El texto bíblico que el Señor ha puesto en mi corazón es Proverbios 6: 16-19. Dios quiere que profundicemos y meditemos en él y que podamos ver más allá de lo que a simple vista alcánzanos a leer; todo esto con el propósito de edificar y bendecir sus vidas y por supuesto la mía también.

Muchas veces leemos la palabra y sentimos que ese texto no es para nosotras, o tal vez no lo entendemos muy bien y seguimos adelante con la lectura, o nos conformamos con el mensaje general del texto, cuando hay un rio de mensajes específicos para meditar y poner en práctica. Se que nos ha pasado.

Así que después de esta corta introducción entremos en materia:

Proverbios 6:16-19 dice: Hay seis cosas que el Señor aborrece, y siete que le son detestables:

1. los ojos que se enaltecen

2. la lengua que miente

3. las manos que derraman sangre inocente

4. el corazón que hace planes perversos

5. los pies que corren a hacer lo malo

6. el falso testigo que esparce mentiras

7. el que siembra discordia entre hermanos. Proverbios 16:14. NVI proverbios 6:16-19

Estas son las acciones de un perverso del cual el escritor está hablando en los versos del 12-15 del mismo capítulo y donde el vs 15 define el fin de sus pisadas.

· El bribón y sinvergüenza, el vagabundo de boca corrupta, hace guiños con los ojos, y señas con los pies y con los dedos. El malvado trama el mal en su mente, y siempre anda provocando disensiones. Por eso le sobrevendrá la ruina; ¡de repente será destruido, y no podrá evitarlo!

La frase “seis cosas…y aun siete” puede dar a entender que la lista es específica, pero no exhaustiva, o puede indicar que la séptima es la peor de todas. También podría decir que el escritor e inspirador de la palabra quería llamar la atención de estas y enfatizar en la séptima.

La Palabra aborrecer: (Heb sané) aversión, contrario, enemigo, enemistad, menospreciar, odiada, odiar, odioso.

Por lo que podemos ver querida mujer que todo aquel que ama el pecado y hace el mal se constituye enemigo, y está en enemistad con Dios. El Señor nos libre de esta condición.

Con amor, Tania M Olsson.