Una Mujer Cristiana vive por fe

Querida amiga, una vez crees en el Señor Jesucristo por fe, inmediatamente eres justificada, el perdón te ha sido otorgado por creer en aquel que cargo todos tus pecados en su espalda y sufrió lo que en algún momento debiste haber sufrido. Bien podríamos decir “Los justificados por la fe vivirán”

La fe que salva, ósea la fe en el Señor Jesucristo, nos lleva directo a la salvación, a la comunión con el Padre, pero también nos lleva a vivir una vida a los pies del Señor, ¡una vida santa!

Estando en la posición de justificada te da la responsabilidad de adentrarte en la Santa Palabra del Señor, de entender las Sagradas escrituras, “el evangelio” y de vivir pregonándolo hasta el final de tus días.

Y cuando todo esto sucede, lo que tus labios confiesan, han de ser respaldados por tus acciones.

Por lo tanto, vivir por fe, es esperar en la voluntad de Dios, es confiar en Él plenamente, es caminar viviendo el presente sabiendo que es Dios quien construye tu futuro. Es esperar y creer con certeza que todo lo que dice Dios es la absoluta verdad para tu vida.

Una mujer cristiana comprende esto muy bien, por lo cual, nada ni nadie podrá moverla del camino que Dios ha trazado para ella.

Y como un incentivo final para resistir con firmeza es el temor de desagradar a Dios. El autor muestra que la vida que agrada a Dios es la vida de la fe: Mas el justo vivirá por fe. Esta es la vida que valora las promesas de Dios, que contempla lo invisible, y que persevera hasta el fin.

Por otra parte, la vida que desagrada a Dios es la de aquel que renuncia al Mesías y se vuelve a los antiguos pasos de su existencia, por lo cual El Señor dice: mi alma no se complace en él.

¿Estas viviendo por fe para el Señor?

Con amor, Tania M Olsson. Nos veremos en una próxima oportunidad con una reflexión más, aquí en Diario de una mujer cristiana. Bendiciones mil.